Electric Light Orchestra - Discovery (1979): Melodias saltarinas y excelentes trabajos de armonias vocales nos ofrece la banda de Liverpool. Con un demoledor comienzo en "Shine a Little Love" dejan clarito como se viene la mano. El hitazo, "Last Train To London" es para pararse y salir bailando, mientras que "Confusion" y "Need Her Love" son piezas de una dulzura incalculable. Devotos seguidores de los Fab Four, estos tipos hacen honor a su causa, sobre todo, a punta de brillantes melodías.
Silverchair - Young Modern (2007): Porque siempre es bueno corregir el camino, aunque seas lapidado por tus chascones fans, es sano abrazar las grandes glorias del pop. Un disco que se veia venir despues de Diorama, infinitamente deudor de la magna obra de Brian Wilson y compañia logra aprobar el exmanen del pop bien hecho. De todas formas las guitarras estan bastante presentes, a base de guitarras filudas en "Young Modern Station", el primer corte del disco. La corona la pone "Those Thieving Birds (pt1) Strange Behaviour (pt2)" un tema para llorar porque aun tenemos migajas de belleza en el rock.
Paul McCartney - McCartney (1970): La banda más brillante de todos los tiempos se habia separado y Harrison tenia bajo el brazo "All Things Must Pass" y Lennon "John Lennon/Ono Plastic Band". La pega era por decir poco, titánica para competir contra sus colegas, pero Macca tenia lo suyo y a pesar de quedar eclipsado por tanta competencia, este disco muestra a un Paul desprovisto de la psicodelia y de la grandilocuencia exceptuando "Maybe I'm Amazed". El Creador de himnos sólo habia dado una muestra de que la capacidad de hacer grandes canciones estaba intacta. "Junk", no es para nada un tema veraniego, pero puta que es hermosamente triste.
The Beach Boys - Today! (1965): Un año antes de hacer el disco mas bello de la historia del rock, los californianos mostraban su Rubber Soul , es decir, el peldaño que hay que dar antes de quedar en la historia. El primer tema "Do You Wanna Dance" no puede ser mas playero y pegote, y la energia no para hasta el sexto corte "Dance, Dance, Dance", un titulo mas que sugerente. La segunda parte del disco avanza hacia lo que sería Pet Sounds mostrando calidad incalculable en voces y arreglos. Brian Wilson cocinaba lo que sería su tumba comercial y la cima de la musica el año 66 peleando combo y combo con Revolver. ¿ Que los Stones hicieron temblar a los Beatles en alguna ocasión? No se equivoque, porque este disco fue la prueba de fuego para los de Liverpool, la vara con la cual medir si podian conquistar el mundo.
J. Peralta