Cuando estuve aferrado a sentimientos y valores sólidos, tenia mis pies puestos en la tierra y el viento estaba a mi favor. Uno no se percata cuando es relamente el momento en que va en la cresta de la ola, y debe ser por la velocidad y la capacidad de naturalizar las cirscuntancias. Cuando todo es bueno durante un periodo relativamente largo tiempo, da la sensacion de eternidad, uno se deja llevar. En fin, no tiene sentido detallar mi actual situacion, pero sin duda, es completamente diferente. Estar alerta, mirar de reojo, y perder la mitad de mis convicciones, a cambio de comenzar de cero y estar pendiente de lo que tenga preparado el destino. Arriba o abajo, da lo mismo, siempre el Destino es un cabrón que hace lo que se le da la gana. Aquí a Él no lo metamos al baile, que quizas tiene aún algo que decir.
J. Peralta
1 comentario:
Buena actitud pequeñin.
cuidate mucho, y cuenta siempre que estaré a tu lado, con látigo o sin látigo.
te quiero fenmin
Publicar un comentario