lunes, 5 de julio de 2010

Vida Mundial

Días previos al mundial, el público, aficionados, hinchas y mujeres*, comienzan a entrar en la espectacion que genera ver a las máximas estrellas chuteando la pelotita, ver colores, camisetas, chuletas de antología, tapadas extremas y mas de algún condoro arbitral. En estos días se traman las más truculentas historias de futbolistas, noticias sobre lesiones, rivalidades, confrontaciones mediaticas y posibles alineaciones. Se revisan los más añejos tesoros audiovisuales de las selecciones, donde destacan los condoros en el caso de Chile. Se hacen estadísticas de los mas extraños sucesos y se generan por sobre todo espectativas e ilusiones.
El primer día de mundial es un día infinitamente orgasmico. No importa quien mierda juegue, pero hay que ver el partido inaugural, es como estar en un matrimonio o en una gran celebración de la que uno se siente parte, ya que al parecer la humanidad es la que celebra. Es en este día cuando las especulaciones comienzan a desaparecer y cuando desaparece el nerviosismo inicial del hincha en general.
A medida que avanzan los partidos, lo importante ya no es ver los partidos, sino anticiparse y comenzar a tramar posibles equipos destacados. Es extraña la sensacion de querer saber pronto quien será el campeón, subcampeón y otros premios.
Sin embargo hoy, de a poco se van alejando las gambetas y las pulsaciones a mil, y nos va quedando la ingrata y friolenta estadistica, la imagen y el recuerdo. El primer momento que te lanza a la realidad, la de las responsabilidades, donde no existe esa ilusión que nos lleva a la infancia, es sin duda cuando el propio equipo queda eliminado. Como cuando termina un carrete, queda solo el desorden en la casa y la obligacion de ordenarla. Seguido del primer encuentro cara a cara con la adulta realidad, viene lo que nadie quiere: que termine el mundial. Es lisa y llanamente quedar viudo. ¡Son 4 años!, ¡Quizás 8 o 12!, ¿¡Quien sabe si veremos una vez más a nuestra selección en un mundial!?. ¡¿y si se arma una guerra y cagamos con el mundial?!, ¿¡ y si el calentamiento global derrite los estadios!?, ¿¡ y si pelao Acosta vuelve a la selección!?, ¡¿ Vamos a tener que comentar puras weas en la U?!. En fin, son tantos los peligros, que da pena ver como se marchan lindos momentos de mandar a la chucha las responsabilidades, tomar porque sí, y ver gente celebrando en las calles. El mundo estará de duelo durante los próximo cuatro años, hasta que vuelva en gloria y majestad el mejor invento de la humanidad, como dijo el Daniel.
J.Peralta
PD: ¿que le echai la culpa a Estrada?, lonji.
*Sin ntenciones de machismo decimononico, me parece dificil la clasificacion de las mujeres en uno de los grupos aludidos al comienzo, por lo tanto estaran en una categoria unica.

3 comentarios:

La Tribu/Profes/Historia dijo...

siempre es agradable leer tus particulares analisis de la ralidad,más si se trata sobre fútbol.

PD: Insisto en mi hipotesis sobre Estrada. Asi de Longí.

La Tribu/Profes/Historia dijo...

Siempre es agradable leer tus particulares analisis sobre la realidad, sobre todo si se trata de fútbol.

Lo del machismo no parece del S. XIX. más bien del pleno siglo XXI.

PD: Insisto en mi hipotesis sobre Estrada, asi de Longí.

Zesju

Anónimo dijo...

Estrada entero lagi!!

Concuerdo... extrañaré esos momentos de caminata en la alameda, saltando y acompañando a miles de hinchas festejando un triunfo de chile...

si... viudos, quizas por...4 años?
Si es que Piñera se sigue agilando y por culpa de él, Bielsa se vaya.