En mi vida, y a mis cortos 21 años, he logrado identificar seis características que me han formado como persona, que han moldeado mi personalidad, mi forma de ver y sentir el mundo.
1- Violencia: Golpes que jamás olvidare en mi infancia. Situaciones que marcan un antes y un después en tu etapa de crecimiento. Creo que la Myrian todavía tiene esa cruz en su espalda. Yo jamás pienso deshacerme de la mía… ya se lo que no tengo que hacer si llego a ser padre.
2- Frialdad: Extirpar las emociones que me dañaban fue algo de lo que hasta el día de hoy no me arrepiento. Esas emociones que te someten, que te hacen esclavo de otros y que muy a menudo te impiden tomar decisiones lo más sabias posibles, ya que el no sentir (o por lo menos no como los otros) no me determina en lo absoluto. Palabras como cariño, afecto, amor entre otras, las re-signifique, las modifique y las aplique de una forma un tanto distinta tal vez al común de otras personas. No digo que sea malo o bueno, digo que a mi me deja más que satisfecho el como soy. No busco la aprobación de nadie, y creo que la tribu ha sabido aceptarme y apreciarme así.
3- Soledad: Ver que todos mis amigos, en esa época teníamos entre 10 y 12 años, estaban en situaciones problemáticas entre si iban al cine o a jugar a la pelota, me hizo percatarme de algo: claramente yo tenia otras preocupaciones. Saber si iba a comer ese día, saber si tendría que salir a trabajar para ganarme unos pesos, saber si nuevamente estaría en medio de las cervezas de mi viejo y la depresión de la Myrian, saber cuantas horas estaba solo en el día y llevando una cuenta de ello, me permitieron hacerme una pregunta ¿Soy igual a ellos?. Entonces el hecho de estar solo ya no me molestaba, me empezó a agradar el hecho de tener mi espacio donde no entraba nadie sin mi autorización, ya sea en mi casa, como en mi interior. Ya no me importaba quien llegaba tarde o no, de hecho yo comencé a llegar tarde, y me sentía invadido, incomodo cuando había más gente en casa. La soledad es más dulce de lo que se cree, deja que te ame, y aprende amarla, seguramente encontraran lo que han buscado por largo tiempo, a ustedes mismo.
4- Independencia: No la podría entender sin la soledad y la frialdad. Tiene un carácter práctico y otro emocional. El primero por que si quería que la vida no me comiera, tuve que aprender a responder por mis propias necesidades. Desde lavar mi ropa, hasta mantener mi propio hogar cuando me fui de casa. Y el segundo por que no necesite cursilerías como un “te quiero” o “estoy orgulloso de ti” para sentirme realizado. El apoyo era para el que lo necesitara, y yo por lo visto, me valía por mi mismo. Yo me sentía orgulloso de mi, no con un afán de soberbia, sino que por el contrario, con un alto grado de resignación: Estoy Solo. Depender de las pasiones y emociones de otros es algo por lo cual creo que ya estoy encima.
5- Valor: Tomar decisiones y asumir consecuencias, que muchas veces no me agradaron, me enseñaron que los principios, la fuerza y las creencias se forman, se crean, y por consecuencia, yo tengo las mías. Tener la entereza para afrontar lo que se me ponga enfrente. Me queda una vida para tratar de ser consecuente, y espero no fallar.
6- Coraje: Tener miedo. Todos tenemos miedos, por diferentes cosas. Cada uno con sus demonios. Pero hay algo que distingue a los hombres, entre unos y otros: a algunos los vence a otros no. Mi primera pelea, asustado, viendo personas por todos lados golpeándose, me dio miedo…pero no me impidió perderme entre el tumulto de puños de dar y recibir. La violencia como practica humana, en inevitable, y hay que saber que en un bosque infestado de lobos (me viene hobbes a la cabeza) tienes que aprender a morder más fuerte, por que más de alguna ves te querrán morder a ti. Y si te vencen, no es impedimento para volver a ocupar tus puños.
Este es mi discurso de identidad, así es como visualizo a Daniel Ramírez. No me importa si alguien esta de acuerdo o no, no me importa si alguien me cree o no, pero hay que tener claro que se quien soy, como soy, y gracias a eso hacia donde quiero ir. Nose si la tribu me vera de esta forma (que al fin y al cabo son la excepción y los que más me importan a la hora de reflejarme como amigo) pero si se que en la tribu no tengo problemas en ser quien soy.
Zesju.
